“El sadomasoquismo es una práctica sexual que usa el dolor y la dominación para conseguir placer, pero siempre y cuando se reconozcan los límites, no tiene nada de malo experimentarlo”, afirma la sexóloga Michela Guarante. En otras palabras, sí se puede realizar sadomasoquismo de forma segura.
Por su parte, el psiquiatra Neel Burton indica que si se practica de manera consensual, la imposición o recepción del dolor mejora el placer sexual. Siempre consúltale a tu chico si le gustaría ser parte de esta fantasía erótica, antes de intentarlo. De la comunicación que tengan en la cama dependerá el momento placentero que están a punto de iniciar.
Eso sí, el experto asegura que las parejas no deben confundir el sadomasoquismo con agresión sexual.
Entonces, ¿cómo hacerlo de forma segura?
Los datos revelan que entre el 7 y 14% de las parejas que propician el sadomasoquismo, lo consumen.
Una investigación de Tilburg University reveló que el sadomasoquismo mejora la salud mental. Si tiene tantos beneficios, ¿por qué no intentarlo?
Basicamente hay una serie de ideas esenciales a aquellas parejas deseosas de dar un giro de 180 grados a su relación. Aparte de poder estar con una ama domina en Valencia. ¡Atención!
1. “Privatizar”: ¿Sabías que si tu chico no ve ni escucha, sus sensaciones corporales aumentan? Comienza con una venda en sus ojos y un juego. El amo (la mujer) acaricia al sumiso y le deja saber qué fantasía se le apetece en ese momento. Hazlo sufrir tanto como desees.
2. Inmovilizar: Quien ata “no es necesario que lo haga con dolor”, comenta la experta. En el caso de los novatos, bastará la sensación de no desasirse. Como precaución, ten cerca unas tijeras escolares en caso de que el atado se agobie.
3. Azotes: ¿Quieres ir más allá? Empieza con algunas nalgadas suaves. Eso sí, antes de comenzar se tiene que acariciar la zona para relajar a tu pareja. Luego podrás ¡castigar!…
“El objetivo es que quien recibe se relaje, así la sangre se concentrará en la zona aumentará la excitacion. El placer no está en la fuerza, sino en ese juego, que se puede acompañar con caricias genitales”, aconseja la especialista. En tanto, añade que ambos deben estar conscientes y de acuerdo con esta técnica.
4. Seguridad: Lleguen a un acuerdo sobre la palabra que usarán para pedir que la otra persona se detenga. Si el sumiso la usa, el amo se detiene inmediatamente. No se vale escoger “no”, “basta” o “para”…
Un último consejo: “Empiecen por algo sencillo (ir de menos a más) y sean positivos asumiendo que se trata de probar, errar, probar y acertar”